Materiales didácticos para profesores de piano
¿Buscas materiales didácticos divertidos para tus clases de piano? Has dado con el lugar correcto. Vale, quizá te choque entonces el título del post, pero todo quedará aclarado en un momento…
Quizá seas uno de esos profesores que desería motivar a sus alumnos de piano introduciendo juegos y otros recursos lúdicos en el aula. Buena intención no te falta. Qué ansiedad cuando ves caras de aburrimiento o rechazo en tus pupilos de corta edad, tú que te esfuerzas tanto por hacer la clase agradable, ¿no?
A mí también me pasaba antes. Gracias a Dios ya he superado esa etapa hace tiempo.
Cada nuevo curso me devanaba los sesos pensando la programación del siguiente curso y los materiales didácticos musicales que serían mejores, más bonitos, atractivos y efectivos para el aprendizaje a través del piano.
Y sobre todo lo hacía porque se me encargó dar clases a niños bastante pequeños, a partir de tres años. Todo un reto.
Es bonito que por lo menos te plantees hacer algo TÚ para renovar el interés de tus alumnos en la asigntarua, en vez de simplemente culparles a ellos de su desidia, torpeza o rebeldía, sin extraer conclusiones más profundas. Pero mira, ni una cosa ni la otra.
Ni tú tienes que cargar con todo el peso del buen funcionamiento de tus clases, ni ellos tienen culpa de supuestos comportamientos negativos.
Aquí se trata más bien de hacer cambios personales de envergadura, cambios en la forma de pensar, sentir y actuar. Pero mientras haces el proceso, si es que tienes la valentía de hacerlo, ve mirándote este vídeo.
En él comparto contigo todo el repertorio de materiales didácticos enfocados a mis clases colectivas e individuales de piano a niños de tres a seis años.
Embelésate con su encanto y luego tenlos en mente para NO seguir mi modelo.
Más abajo te muestro los mismos materiales didácticos de los que hablo en el vídeo, por si la curiosidad te puede.
Ya me cuentas en comentarios qué te parece lo que te cuento…
Te presento mis materiales didácticos de miérder:
Mira ahora más de cerca mis materiales didácticos mega-cuquis
El país fantástico de Pianonia y sus habitantes con tocado

¿A quién no le apetece visitar este maravilloso país de montañas sospechosamente organizadas en grupos de dos y tres y de aspecto y altura uniformes? A mí.

Dorotea la mulata
¿Brazo derecho rayado insinuando relación con alguna tecla en concreto? ¡Exacto!
¿Y cuándo esa tecla corresponda a un si sostenido? Ya la hemos fastidiado.

Renato, sesentón y ario
Qué bonachón él. Quiero ser su amigo. Sólo así podré aprenderme el, por otro lado, ultrasencillo nombre de la nota RE.

Micaela, asiática, adolescente y con difteria
Cuánta diversidad étnica en Pianonia. Unos inocentes materiales didácticos para piano pueden embutir en las cabezas infantiles los más altos valores... Repelús máximo.

Fabrizio, latino y simpaticón
Premio al gorro más sofisticado. ¡Y sin costuras!

La abuelita cherokee de la nota sol
No recuerdo su nombre. Bueno, eso que gana mi salud mental.

Turco maduro con posibles y relación con nota la
Tampoco sé cómo lo bauticé. De hecho, creo que no llegué ni a introducirlo en las clases.
Otros planes calenturientos estaría tramando ya para mis niños.

Simola, finesa, pelirroja y maestra de escuela
Tiene tanta cara de buenas intenciones que podría ser perfectamente la encantadora maestra de infantil de este país fantástico ávida de encontrar nuevos y excitantes materiales didácticos para la clase de música.

Faro-antorcha para ubicar las claves
Fuego que iluminas el camino en la noche, inspira a estos pobres servidores de la educación que de una p**ta vez dejen de programar e inventar odiosos materiales didácticos (como éstos que yo mismo inventé en su día) que coartan la libertad de pensamiento, la creatividad y el amor por el aprendizaje. Amén.
Materiales didácticos para introducir a escalas y arpegios
Uno de mis materiales didácticos más inquietantes y crípticos. Hace falta echarle mucho esfuerzo para conectar estos dibujitos con combinaciones de cinco teclas.

Señor con sombrero
Tiene toda la pinta de querer representar el uso de las tres teclas negras que van seguidas y dos blancas a los lados.
Nunca podría estar del todo seguro porque todo parecido con la realidad es pura coincidencia.

Pirámide chaparrita con palmera
La pirámide sin palmera era una secuencia de cuatro teclas blancas más una negra enmedio (la cúspide).
La palmera cambiaría una de las blancas de la izquierda por una negra. ¿Quién lo habría imaginado?

Sol naciente con pajarraco
De izquierda a derecha, tres teclas blancas seguidas, una negra y otra blanca.

Cucharón de caldo con mosca
Imposible encontrar la relación del dibujo, guiño a los chistes de sopas, con algún fragmento de escala reconocible.
¿Por qué no dejar que el niño en cuestión produjera su propia imagen, en el caso en que realmente hubiera necesitado hacerlo?

Pulpo de río quiere ser puente
El puente entre la "tecla fa sostenido" y la "tecla do sostenido" tiene un hueco enmedio de teclas blancas demasiado grande como para saltarlo.
Este pulpito tan majo nos ayudará a reducirlo prestándonos su pata para convertirla en la "tecla sol sostenido".

Ladera con baja densidad de población
Desde la tecla blanca del si natural como valle a la del fa sostenido como cima ascendemos y nos encontramos con el abeto (do sostenido) y la cabañita (re sostenido). Mi natural es cacho pelado de cuesta.

Llorón con mosca
Demasiados tirones de orejas para tu cumpleaños, Johnny. Tu pabellón auditivo derecho (para nosotros, izquierdo) se te ha quedado necrosificado. Tanto, que hasta las moscas acuden a ver si rapiñan algo de carroña humana.
Sorpresivamente, este dibujo representaba la misma combinación de teclas que el anterior, pero con un mayor grado de concreción: antes el valle podría haber sido la tecla del si o del do. La inflamación orejil no deja lugar a dudas... Dios mío.
Materiales didácticos para onomatopeyas pianísticas
Los medios de transporte, los monstruos de Halloween, los animales, los fenómenos atmosféricos… tienen sus ruidos característicos y pueden formar parte del bagaje sonoro de un niño de etapa infantil.
Hasta ahí bien. Pero, ¿imponer una versión musical de cada uno por mis santos coj***es, sin admitir cualquier otra de su creación? ¿Simplificarlos a un mero patrón rítmico repetido dentro de una tesitura arbitraria dentro del registro del piano? No era necesario.

La bicicleta

El cochecito
En la colección había otro coche más grande y deportivo que tenía el mismo patrón pero en un registro más grave.
Qué grandes ideas... puajjj. Como se te ocurra aplicarlas en el aula te rajo.

El patinete

Partitura simplificada con la grafía musical del sonido de la bicicleta
Ahí metiendo a calzador la representación de la escritura convencional de partituras.
¿Que no les interesaba? Ni lo sé, pero, ¡qué más da...!
Materiales didácticos para la transformación de motivos precocinados
Aquí os dejo primero las tarjetas que representaban características de los motivos, todos ellos de cuatro tiempos.
Los vasos se referían a la densidad de notas presente en el segundo tiempo.
El tren corto implicaba ausencia de nota en el cuarto tiempo. El largo, presencia.
El chaval mirando a la estrella era para los motivos con un camino de entonación ascendente, de grave a agudo. El mismo mirando al caracol, para motivos con camino de entonación descendente, de agudo a grave.
El sol se identificaba con el modo mayor y la luna, con el menor.
El personajillo saltando el arroyo era para motivos donde la entonación pasaba directamente de un grado de escala a otro ubicado a una tercera de distancia, por ejemplo sol-sol-mi. El mismo personajillo sorteando el arroyo por la sólida roca hacía referencia a motivos con notas de paso a distancia de segunda conectando los extremos separados por una tercera, por ejemplo sol-fa-mi.
Por último, la casa con el número uno en la fachada establecía un símil entre estar en el primer piso y los motivos cuya tesitura estuviera encerrada entre los grados I y III de una escala. El segundo piso etiquetaba a los que se movían dentro de los grados III a V, y el tercero, entre V y VI. El súmum de la arbitrariedad… como los demás materiales, por otra parte.













Y bueno, queridas, queridos, querides, he sufrido un empacho de materiales didácticos de mi***, así que en otro post, más.
¿Qué os han parecido? O más bien, ¿qué posición tenéis ante el hecho de programar y de utilizar materiales como éstos en vuestras clases de música? ¡Comentad!